Last chance

Hasta hace un par de días toda mi vida la he vivido con gran intensidad. Esto me ha traído cosas buenas interesantes y divertidas, pero también una serie de problemas que han puesto en riesgo cosas que son muy importantes para mi.

Generalmente, hacía lo que creía conveniente en ese preciso momento, tomaba decisiones intempestivas, y mil veces hablé y actué antes pensar en las consecuencias de mis actos, aunque por un lado es bueno tener una dosis de espontaneidad, también es muy importante tener una dosis de cordura y sensibilidad para analizar las posibles consecuencias de mis acciones.

He perdido ya cosas que quiero por esta manera de ser, he puesto en riesgo lo más valioso por lo que no tiene trascendencía, como derrochar el esfuerzo de ganar un dinero en un periodo de un mes y derrocharlo en 10 segundos en una mesa de ruleta.

La confianza de la mujer que más amo en el mundo y la posibilidad de estar con ella, y el día viernes casi pierdo la vida, ¿Cuántas veces me arriesgue sin consecuencias? Me queda más que claro lo afortunado que soy al poder hacer esta reflexión y aunque ya es muy tarde para algunas cosas, es buen tiempo para otras. Debo luchar por cuidar las cosas que amo y que son importantes, y en verdad luchar por mantenerlas.

Respirar profundo y notar que son muchas las cosas que tengo y que sino aprendo a cuidarlas las perdere todas, empezando por la salud, la vida y las personas que amo. Hago un compromiso en silencio conmigo mismo, y es la firme promesa de cuidar las cosas que son importantes en mi vida, que me han dado tanto y que amo. Aún las que he perdido.

Sólo me queda luchar, vivir con intensidad pero esta vez, con la consciencia en mi fragilidad de ser humano y lo delicado de la cosas, que si esta vez no lo hago importante, tal vez no vuelva a tener la oportunidad de hacer esta reflexión.