Consciencia de la libertad

De los colores oscuros...
de las noches tibias...
de la ciudad que vibra con las luces, los olores...
y la gente;

De los eternos suspiros del hombre con miedo,
Con una extraña y paranóica compañía canina,
Y la tranquilidad de saber que puede ser.

Tantos anhelos que se suman a los deseos de conocer,
Con los brazos llenos de besos, ternura y fuego.
Un mundo de ideas ilusorias y sueños abandonados por otros.

Mientras por muchos días mis ojos permanecieron cerrados...
hoy me niego a no notar la plenitud y la luz de la noche,
Y en sus ojos recordarte y verme a mi junto a ti...
Tranquilo.

La sensación irónica de un cigarro sin tener que fumarlo,
El deseo animal de dominio saciado por la idea de poder,
La grandeza y la gloria desde los comodos zapatos de la humildad...
Pensando.

Dejan mis manos atrás las viejas riendas,
Doy pues mis primeros pasos descalzos sobre mis nuevas reglas,
Disfruto de mi amada soledad en tu compañía,
Siento el placer de tenerlo todo...
En un largo camino, hacia un simple paso más.